La codicia humana que probablemente surja del egoísmo ancestral para sobrevivir perdura a día de hoy como una tóxica condición.

Obra perteneciente a la serie «Pareidolia», inspirada por el fenómeno psicológico mediante el cual nuestra mente ordena estímulos visuales para generar imágenes conocidas. El proceso creativo consiste en aplicar manchas de manera aleatoria para crear «nubes» abstractas e inconscientes, sobres las que la mente consciente trabaja para crear figuras que quedan representadas a veces parcialmente, dejando otras manchas abiertas a la interpretación del espectador, generando variedad de descubrimientos dependiendo de  la mente que analice la obra según sus proyecciones personales. Es curioso que, cuando surge la primera proyección, las que siguen quedan suelen quedar condicionadas por ese mismo concepto o temática, quizá por la dificultad de la inteligencia humana para desordenarse.